Unai Ziarreta ha advertido esta mañana en Gasteiz a la sociedad vasca de la gran mentira de la polarización entre PNV y PSE y ha prevenido además al electorado abertzale ante los intentos del PNV de presentarse ante la ciudadanía como la única opción posible del nacionalismo vasco en las urnas. El presidente de EA y candidato a lehendakari ha participado en un mitin en la capital alavesa en el que también ha intervenido el cabeza de lista por Araba, Rafa Larreina.
Ziarreta ha recurrido a la ironía para admitir que “claro que es útil votar al PNV”, alertando a continuación de que “es útil para colocar la bandera española en el Parlamento, para acatar el marco legal que nos impide opinar y ser consultados, para pactar con el PSOE, para garantizar la unidad de España en definitiva”. A este respecto ha recordado que “en el PNV no manda Ibarretxe, sino Urkullu y José Luis Bilbao”, por lo que “votar a Ibarretxe es votar la política que decide Urkullu”.
Frente a ello, Unai Ziarreta ha ensalzado el valor del voto a EA, “útil para luchar contra la crisis y útil también para superar el marco legal vigente y construir un nuevo escenario político de paz y normalización” en el que todos los proyectos políticos sean posibles democráticamente. En este sentido, ha constatado que “en Euskadi las cosas no pueden seguir igual”, sin paz ni normalización política, y se ha comprometido a “arriesgar en búsqueda de la solución” en contraposición a quienes, como el PNV, “prefieren la comodidad al riesgo” y quienes, como el PSOE y el PP, “no quieren cambiar nada porque les va bien así, imponiendo su idea de España”.
El presidente de EA ha asumido por ello “la responsabilidad del cambio que necesita la sociedad vasca, el que consiste en respetar y hacer respetar su voluntad mayoritaria”, el cambio que mediante la aprobación de una Ley de Soberanía nos permitirá construir un nuevo marco legal para tener nuestras propias herramientas para hacer frente a los retos del futuro y, en primer lugar, a la crisis económica. En este apartado ha defendido el aumento de la inversión pública en infraestructuras como fórmula más eficaz para la protección del empleo, un incremento del gasto que, según ha explicado, el Gobierno vasco puede asumir sin problemas recurriendo al déficit público.
Asimismo, Ziarreta se ha comprometido a mantener y mejorar las conquistas del Estado de Bienestar en todo lo relativo a los servicios sociales. Para ello ha abogado por subir el gasto social y garantizar, especialmente en época de crisis, la calidad de vida de toda la sociedad vasca. Ello será posible, a su juicio, mediante la aplicación de una política fiscal progresista y solidaria que garantice que aportan más a las arcas públicas quienes más tienen y que no renuncie a ningún instrumento recaudatorio, en referencia al Impuesto de Patrimonio, suprimido por PNV y PSE en Araba y Bizkaia, algo que no han logrado en Gipuzkoa gracias a la firme oposición de EA.
Ziarreta ha recurrido a la ironía para admitir que “claro que es útil votar al PNV”, alertando a continuación de que “es útil para colocar la bandera española en el Parlamento, para acatar el marco legal que nos impide opinar y ser consultados, para pactar con el PSOE, para garantizar la unidad de España en definitiva”. A este respecto ha recordado que “en el PNV no manda Ibarretxe, sino Urkullu y José Luis Bilbao”, por lo que “votar a Ibarretxe es votar la política que decide Urkullu”.
Frente a ello, Unai Ziarreta ha ensalzado el valor del voto a EA, “útil para luchar contra la crisis y útil también para superar el marco legal vigente y construir un nuevo escenario político de paz y normalización” en el que todos los proyectos políticos sean posibles democráticamente. En este sentido, ha constatado que “en Euskadi las cosas no pueden seguir igual”, sin paz ni normalización política, y se ha comprometido a “arriesgar en búsqueda de la solución” en contraposición a quienes, como el PNV, “prefieren la comodidad al riesgo” y quienes, como el PSOE y el PP, “no quieren cambiar nada porque les va bien así, imponiendo su idea de España”.
El presidente de EA ha asumido por ello “la responsabilidad del cambio que necesita la sociedad vasca, el que consiste en respetar y hacer respetar su voluntad mayoritaria”, el cambio que mediante la aprobación de una Ley de Soberanía nos permitirá construir un nuevo marco legal para tener nuestras propias herramientas para hacer frente a los retos del futuro y, en primer lugar, a la crisis económica. En este apartado ha defendido el aumento de la inversión pública en infraestructuras como fórmula más eficaz para la protección del empleo, un incremento del gasto que, según ha explicado, el Gobierno vasco puede asumir sin problemas recurriendo al déficit público.
Asimismo, Ziarreta se ha comprometido a mantener y mejorar las conquistas del Estado de Bienestar en todo lo relativo a los servicios sociales. Para ello ha abogado por subir el gasto social y garantizar, especialmente en época de crisis, la calidad de vida de toda la sociedad vasca. Ello será posible, a su juicio, mediante la aplicación de una política fiscal progresista y solidaria que garantice que aportan más a las arcas públicas quienes más tienen y que no renuncie a ningún instrumento recaudatorio, en referencia al Impuesto de Patrimonio, suprimido por PNV y PSE en Araba y Bizkaia, algo que no han logrado en Gipuzkoa gracias a la firme oposición de EA.
Fuente: Eusko Alkartasuna
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