La Fundación Euskal Memoria comenzó su andadura en noviembre de 2009, con el objetivo de recuperar y reconstruir nuestra memoria, y con un doble compromiso de cara a ello. Por una parte, llevando a cabo una labor divulgativa, y por otra, en el plano documental, dando pasos firmes hacia un Centro de Documentación permanente.
Euskal Herria, pueblo negado y oprimido, sufre la falsificación constante de su historia. Día tras día, la ofensiva ideológica de los estados español y francés hace mella en nuestra perspectiva. Los medios de comunicación, el currículum educativo, el discurso institucional y la doctrina antiterrorista llevan décadas imponiendo una versión adulterada de lo que somos y hacemos.
Buscan deslegitimar nuestro origen, tachar de mitos absurdos las bases de nuestra identidad colectiva y, con ello, desactivar nuestro futuro. Mienten sobre el pasado, para que temamos el presente y perdamos el futuro.
Recuperar la memoria colectiva de Euskal Herria es una tarea de plena actualidad. Ligada con la construcción de la nación vasca y con las garantías históricas de un proceso democrático aún pendiente. Vale la pena el esfuerzo por conseguir ser los principales guionistas y narradores de nuestra propia historia. Entender lo que somos, de dónde provenimos y por qué persiste la opresión que nos niega, es condición indispensable para cambiar las cosas.
La memoria histórica en Euskal Herria no se inscribe en el plano de la discusión entre eruditos. Es el mecanismo más eficaz para preservar que el testigo de la verdad y de la resistencia pase a las siguientes generaciones. Palanca para el cambio político y social. Antídoto contra las mentiras oficiales. Trinchera eficaz ante la ofensiva que pretende borrar nuestra identidad y demandas de las calles y libros de texto.
Volver a repasar y repensar nuestra historia es una inversión para superar el conflicto político en Euskal Herria, y acercarnos a una solución en clave democrática. Interpretarla y contarla sin interferencias: ése es el reto que, desde el punto de vista histórico, propone Euskal Memoria. En cuanto entendamos la evidencia de que la Guerra de 1936, el franquismo, la Reforma, el centralismo francés y el constitucionalismo español son eslabones de una misma cadena, la perspectiva global sobre el conflicto, su origen, efectos y resolución se alterará. Sólo entonces empezaremos a vencer también en la redacción de nuestra propia percepción de la verdad. Nuestra verdad será igualmente visible, y ganar el futuro será un reto costoso pero posible.
OBJETIVOS DE EUSKAL MEMORIA
Euskal Herria, pueblo negado y oprimido, sufre la falsificación constante de su historia. Día tras día, la ofensiva ideológica de los estados español y francés hace mella en nuestra perspectiva. Los medios de comunicación, el currículum educativo, el discurso institucional y la doctrina antiterrorista llevan décadas imponiendo una versión adulterada de lo que somos y hacemos.
Buscan deslegitimar nuestro origen, tachar de mitos absurdos las bases de nuestra identidad colectiva y, con ello, desactivar nuestro futuro. Mienten sobre el pasado, para que temamos el presente y perdamos el futuro.
Recuperar la memoria colectiva de Euskal Herria es una tarea de plena actualidad. Ligada con la construcción de la nación vasca y con las garantías históricas de un proceso democrático aún pendiente. Vale la pena el esfuerzo por conseguir ser los principales guionistas y narradores de nuestra propia historia. Entender lo que somos, de dónde provenimos y por qué persiste la opresión que nos niega, es condición indispensable para cambiar las cosas.
La memoria histórica en Euskal Herria no se inscribe en el plano de la discusión entre eruditos. Es el mecanismo más eficaz para preservar que el testigo de la verdad y de la resistencia pase a las siguientes generaciones. Palanca para el cambio político y social. Antídoto contra las mentiras oficiales. Trinchera eficaz ante la ofensiva que pretende borrar nuestra identidad y demandas de las calles y libros de texto.
Volver a repasar y repensar nuestra historia es una inversión para superar el conflicto político en Euskal Herria, y acercarnos a una solución en clave democrática. Interpretarla y contarla sin interferencias: ése es el reto que, desde el punto de vista histórico, propone Euskal Memoria. En cuanto entendamos la evidencia de que la Guerra de 1936, el franquismo, la Reforma, el centralismo francés y el constitucionalismo español son eslabones de una misma cadena, la perspectiva global sobre el conflicto, su origen, efectos y resolución se alterará. Sólo entonces empezaremos a vencer también en la redacción de nuestra propia percepción de la verdad. Nuestra verdad será igualmente visible, y ganar el futuro será un reto costoso pero posible.
OBJETIVOS DE EUSKAL MEMORIA
El proyecto Euskal Memoria quiere dar un salto adelante precisamente en el ámbito de la recuperación de nuestra historia. En este ejercicio colectivo es imprescindible tejer una red eficaz para aportar y recibir, así como para garantizar el trabajo de recopilación y divulgación de toda la información recabada. La iniciativa Euskal Memoria quiere convertir en realidad ese ejercicio colectivo, pueblo a pueblo, sector por sector, de recuperación de nuestra raíz histórica. Un esfuerzo que desplegaremos poco a poco, pero dando pasos decididos y determinantes en el camino emprendido.
Nuestros objetivos, aÚn siendo a largo plazo, queremos concretarlos paso a paso desde ahora mismo. Por un lado, vamos a estructurar el trabajo de recopilación sobre el que documentar nuestra base histórica. Dicho de otro modo, desplegar una red de información amplia, popular y participativa, que nos permita construir nuestra propia perspectiva. El fin sería crear y consolidar un centro de documentación permanente en un futuro cercano. Entre tanto, seguiremos dando pasos en esa dirección, como el trabajo de documentación para el libro “No les bastó Gernika” nos está mostrando.
Por otra parte, nos parece muy importante trasladar a la sociedad nuestro trabajo. Para ello, una de las tareas de esa red ha de ser, necesariamente, divulgativa. En tanto que nuestro Pueblo sólo ganará en conciencia de sí mismo conociendo su propia historia, y dotándose de un punto de vista propio para forzar el cambio, es preciso ahondar en el trabajo ideológico y social, desde una metodología abierta, participativa y dotada de múltiples recursos.
Nuestros objetivos, aÚn siendo a largo plazo, queremos concretarlos paso a paso desde ahora mismo. Por un lado, vamos a estructurar el trabajo de recopilación sobre el que documentar nuestra base histórica. Dicho de otro modo, desplegar una red de información amplia, popular y participativa, que nos permita construir nuestra propia perspectiva. El fin sería crear y consolidar un centro de documentación permanente en un futuro cercano. Entre tanto, seguiremos dando pasos en esa dirección, como el trabajo de documentación para el libro “No les bastó Gernika” nos está mostrando.
Por otra parte, nos parece muy importante trasladar a la sociedad nuestro trabajo. Para ello, una de las tareas de esa red ha de ser, necesariamente, divulgativa. En tanto que nuestro Pueblo sólo ganará en conciencia de sí mismo conociendo su propia historia, y dotándose de un punto de vista propio para forzar el cambio, es preciso ahondar en el trabajo ideológico y social, desde una metodología abierta, participativa y dotada de múltiples recursos.
LOS PILARES DE EUSKAL MEMORIA
¿Cómo afrontar ese desafío? Nos proponemos dar los primeros pasos, básicos pero irreversibles, sobre diferentes pilares. En primer lugar, poniendo en marcha la Fundación Euskal Memoria. Constituída por personas que, de diferente modo, son referencia o han aportado en el trabajo de recuperación de nuestra historia, esta Fundación será un instrumento más con el que incidir en el ámbito ideológico y social de la memoria histórica. El 20 de noviembre de 2009 la Fundación se presenta públicamente, dando a conocer sus primeras iniciativas y requiriendo el respaldo de Euskal Herria en este largo camino.
El segundo paso, el de la divulgación, está ligado con el compromiso adquirido en ese sentido por la editorial AISE Liburuak. La edición y publicación de todo el caudal de información histórica al que aludimos no será un trabajo iniciado a partir de cero. Al contrario, paso a paso, se trata de una labor ininterrumpida que ha visto la luz a lo largo de muchos años. Sin embargo, con el ánimo de impulsar los objetivos de Euskal Memoria, esta editorial pondrá en marcha un nuevo registro editorial, coherente con otras iniciativas anteriores, pero interesado en profundizar sobre cuestiones concretas. Con ese fin, cada año editará un libro temático en relación con alguno de los aspectos de nuestra historia que más urgente resulta retomar con criterios propios. Además, cada año editará dos revistas con información y nuevas revelaciones en torno a cuestiones relacionadas con la memoria histórica. El primer libro de la nueva colección ha sido “No les bastó Gernika” un balance exhaustivo y lleno de testimonios y datos sobre los efectos que la represión ha tenido sobre Euskal Herria en el último medio siglo.
En este libro, que ha visto la luz en diciembre del año 2010, recopilamos los efectos de la represión a lo largo de las últimas cinco décadas. Esta síntesis no sería posible sin la red de información y complicidad extendida ya por muchos pueblos de Euskal Herria. Es la filosofía que se extenderá a próximos trabajos de divulgación, siempre orientados a hacer luz sobre algunos de los episodios más silenciados o falsificados de nuestra historia. AISE Liburuak abre esta nueva línea editorial conocedores del gran esfuerzo de divulgación que en este campo han hecho y siguen haciendo otras muchas organizaciones y personas, cuya tarea no venimos a sustituir, sino a complementar modestamente. Todos los esfuerzos son necesarios para alcanzar los objetivos señalados.
¿Cómo afrontar ese desafío? Nos proponemos dar los primeros pasos, básicos pero irreversibles, sobre diferentes pilares. En primer lugar, poniendo en marcha la Fundación Euskal Memoria. Constituída por personas que, de diferente modo, son referencia o han aportado en el trabajo de recuperación de nuestra historia, esta Fundación será un instrumento más con el que incidir en el ámbito ideológico y social de la memoria histórica. El 20 de noviembre de 2009 la Fundación se presenta públicamente, dando a conocer sus primeras iniciativas y requiriendo el respaldo de Euskal Herria en este largo camino.
El segundo paso, el de la divulgación, está ligado con el compromiso adquirido en ese sentido por la editorial AISE Liburuak. La edición y publicación de todo el caudal de información histórica al que aludimos no será un trabajo iniciado a partir de cero. Al contrario, paso a paso, se trata de una labor ininterrumpida que ha visto la luz a lo largo de muchos años. Sin embargo, con el ánimo de impulsar los objetivos de Euskal Memoria, esta editorial pondrá en marcha un nuevo registro editorial, coherente con otras iniciativas anteriores, pero interesado en profundizar sobre cuestiones concretas. Con ese fin, cada año editará un libro temático en relación con alguno de los aspectos de nuestra historia que más urgente resulta retomar con criterios propios. Además, cada año editará dos revistas con información y nuevas revelaciones en torno a cuestiones relacionadas con la memoria histórica. El primer libro de la nueva colección ha sido “No les bastó Gernika” un balance exhaustivo y lleno de testimonios y datos sobre los efectos que la represión ha tenido sobre Euskal Herria en el último medio siglo.
En este libro, que ha visto la luz en diciembre del año 2010, recopilamos los efectos de la represión a lo largo de las últimas cinco décadas. Esta síntesis no sería posible sin la red de información y complicidad extendida ya por muchos pueblos de Euskal Herria. Es la filosofía que se extenderá a próximos trabajos de divulgación, siempre orientados a hacer luz sobre algunos de los episodios más silenciados o falsificados de nuestra historia. AISE Liburuak abre esta nueva línea editorial conocedores del gran esfuerzo de divulgación que en este campo han hecho y siguen haciendo otras muchas organizaciones y personas, cuya tarea no venimos a sustituir, sino a complementar modestamente. Todos los esfuerzos son necesarios para alcanzar los objetivos señalados.
PERSONAS FUNDADORAS DE EUSKAL MEMORIA
Jesús Lezaun Sacerdote - Jorge Cortés Izal Impulsor de las ikastolas - Iñaki Egaña Escritor - Fermín Balentzia Cantautor - Graxi Etxebehere – Iñaki O’Shea Miembro de IPES - Periko Solabarria Sacerdote y sindicalista - Erramun Martikorena Cantautor - Andoni Txasko Asociación 3 de marzo - Floren Aoiz Analista politico - Jose Mari Esparza Editor - Ane Muguruza Estudiante - Lucio Urtubia Albañil y anarquista - Jose Manuel Pagoaga "Peixoto" Refugiado político - Eñaut Elorrieta Cantante de Ken Zazpi - Koldo Amezketa Parlamentario de EA - Fernando Larruquert Fotógrafo y cineasta - Itziar Aizpurua Militante abertzale.-
Mas información en Euskal Memoria
1 comentario:
La Regencia de Nabarra. Naparrako Erregeordetza.
CARTA ABIERTA AL SR URKULLU
2012-01-23
Cada vez que escucho sus dementes arengas ante una ciudadanía desgraciadamente manipulada, y no solo por parte española, si no, incluso por ustedes mismos. Naturalmente, todo ello en aras de lograr nuevamente que Madrid les dé el virreinato de la Nabarra-Occidental. Quienes no dudan, ni dudaron en adaptarse la historia ancestral a la medida de sus intereses personales. ¿Le van a llamar razón de Estado?
A la vista está, existió y existe una total connivencia entre ustedes y el Estado ocupante, creyéndose que ya son un Estado(?), pero pagando el cupo obligado al invasor. Máxime, cuando su pseudo Estado de Euskadi es simplemente un territorio colonial de la España imperial, como en idénticos términos lo es la Comunidad de la "Navarra, foral y española".
Todo este entramado tiene un origen, como lo fue la creación de unos feudos o en su caso txiringuitos (perdón por tan vulgar expresión, pero a título personal como nabarro-legitimista les considero como a los listos y oportunistas de turno).
Mire usted, de sus constantes mentiras y fábulas contadas durante décadas, o mejor en el periodo de un siglo, las que ustedes mismos han terminado creyéndose, que son un estado. Prueba infalible de ello, lo demostraron ustedes en 1940 en Londres, cuando el gobierno vasco en su exilio redactó un proyecto de Constitución para toda la Nabarra. Contemplando su 5ª disposicion que el territorio del Estado era el histórico del Reino de Nabarra. ¿Les respondió la Comunidad Internacional? (obviaron a la Corona nabarra, la que ni renunció, ni capituló ante los ocupantes. Por lo que, sus derechos están vigentes, por ser imprescriptibles).
Pongo punto final a mi escrito, pero le aclaro la que ustedes tratan de obviar, o quizás lo ignoren, que para ejercer precisan legitimidad de origen, ya que así lo contempla el Ordenamiento Jurídico, tanto el Nuevo como el Viejo donde dice que: la legitimidad de ejercicio está subordinada a la legitimidad de origen. Por ello, la única legitimidad de ustedes está en el Estado de Nabarra y no en el Euskadi inventado por el fundador de su PNV.
Atentamente
Duque de Beaumont-Evreux
laregenciadenabarra.blogspot.com
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